Más Barato En concierto: Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería USA Fake

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - case

La historia comienza en 1873 cuando el estudiante de tecnología Jules-Louis Audemars conoce al estudiante de economía Edward-Auguste Piguet. La puesta en marcha de su fábrica de relojes en Suiza en 1875 no era más que un experimento, pero, para su sorpresa, acabó siendo un gran éxito. Los relojes Audemars Piguet que fabricaron destacaron gracias a su precisión y su elevada calidad. Y estos son justamente los motivos por los que estos relojes sobresalen en la actualidad. Tener un Audemars Piguet es tener una fina pieza de relojería mecánica creada con una gran artesanía y con unos perfectos acabados.A lo largo de los años Audemars Piguet ha ido sorprendiendo al mundo varias veces con diseños innovadores. En 1925 fabricaron el reloj de bolsillo más fino, y tres años más tarde, el primer reloj con mecanismo visible. Audemars Piguet ha tenido una grandísima reputación justo desde los inicios, pero fue en 1972 cuando crecieron hasta convertirse en una de las marcas de relojes más exitosas del mundo al presentar el “Royal Oak”, un lujoso reloj deportivo con un diseño moderno y radical, algo único en un sector conservador como es el de la relojería.No es únicamente el diseño lo que distingue a Audemars Piguet de las demás marcas; sus relojes también destacan por el empleo de materiales y tecnología de gran calidad. Por ejemplo, Audemars Piguet puede emplear cerámica negra en lugar de acero inoxidable, trabajada a máquina y a mano hasta obtener un acabado satinado. La utilización de tornillos de oro blanco demuestra cómo la perfección está a menudo en los detalles. Dado que estos elevados estándares de calidad también se aplican a los movimientos, comprar un reloj Audemars Piguet significa que se puede disfrutar de él durante muchos años, un motivo por el que los relojes antiguos a menudo se encuentran en tan buen estado.

El Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería es un reloj que podemos clasificar sin exagerar de extremadamente complejo, ya que agrupa con el cronógrafo dos de las mayores complicaciones que existen; el tourbillon y la repetición de minutos. Todo ello no puede calificarse objetivamente de extraordinario ya que este conjunto de complicaciones lo hemos visto en varias de las grandes manufacturas relojeras, pero si añadimos que Audemars Piguet ha invertido 8 años en su desarrollo ya nos da que pensar.

El motivo de tantos años y esfuerzos de investigación y desarrollo no se debe al hecho, ya de por sí exigente, de conjuntar dichas complicaciones sino a la innovación de la repetición de Minutos, hasta el punto que podemos afirmar que habrá un antes y un después de este Royal Oak Concept Supersonería en el mundo de las complicaciones relacionadas son la sonería. Una auténtica revolución sonora!

De este largo camino ya vimos un avance en forma de prototipo de este reloj en el SIHH del 2015; el Royal Oak Concept RD#1. De él os habló Xavier en este artículo. Las formas y el concepto general ya se vislumbraba, aunque los detalles técnicos de que disponíamos eran pocos. Ahora, después de haber tenido en la mano el modelo definitivo, de escucharlo y de recibir con todo detalle las explicaciones del responsable técnico de su creación, ya estamos en condiciones de realizar un análisis a fondo.

 

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería – la caja

Imponente y robusta, son dos calificativos que retratan a la perfección la caja de este Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería. Esta caja sigue la misma linea estética que los demás Concept, que a su vez se inspiran claramente en el diseño inicial del Royal Oak. Este es un diseño que adquirió músculo con el OffShore y que se ha llevado al extremo en el Concept.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - case

Como signo identitario e irrenunciable conserva el bisel octogonal con sus correspondientes cabezas de tornillo visibles, elemento distintivo de todo Royal Oak. En el mismo sentido apreciamos la corona hexagonal, también común a todos los modelos de este legendario reloj. Los demás elementos de la caja ya se salen de la norma y adquieren una geometría extrema y vanguardista, destacando sus ángulos cortantes y el considerable grosor del conjunto, que alcanza nada menos que 16,5 milímetros.

Comparativamente, el diámetro de la caja del Royal Oak Concept Supersonería se puede considerar de relativamente contenido, ya que sus 44 milímetros son una medida muy común en los relojes deportivos actuales. Probablemente por ello la apreciación visual es de un grosor aun mayor del que indican las cifras.

En la imagen siguiente vemos la corredera que activa la función de repetición de minutos a petición. Está realizada en cerámica negra y al accionarla también carga el muelle del pequeño barrilete que proporciona la energía que requiere el funcionamiento de los martillos de la sonería.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - case side

El bisel y la carrura de la caja están realizadas enteramente en titanio, lo que, dadas las dimensiones del reloj, contribuye enormemente a conseguir un peso final razonable, incluso tendiendo a ligero. Por su parte, para la corona y los pulsadores del cronógrafo se recurre a la cerámica. Es de destacar la combinación de distintas decoraciones en estos elementos; satinado y pulido en el bisel, mientras para la carrura se realiza un acabado satinado en sus laterales y granulado en su parte superior. Esta es una característica habitual en los relojes de muy alto nivel ya que para realizarlo es imprescindible la intervención manual de un especialista pulidor.

A priori hubiese parecido más lógico invertir los materiales, utilizando la cerámica para carrura y bisel, ya que estos dos elementos están muy expuestos al roce. La cerámica es prácticamente inmune a los arañazos, mientras que en el titanio el mas mínimo contacto provoca una marca. Con toda seguridad, la explicación la encontraremos en las cualidades acústicas de ambos materiales, un aspecto determinante en un reloj con la complicación de repetición de minutos como es el caso de este Royal Oak Concept.

Prestad atención al fondo de la caja del Royal Oak Concept Supersonería, que en la imagen superior se aprecia con claridad, porque es una de las claves de su revolucionario concepto de sonería que trataremos más adelante.

 

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería – la esfera

En concordancia con el diseño de la caja, la esfera de este Royal Oak Concept Supersonería aporta una imagen decididamente vanguardista. De hecho la base de la esfera propiamente dicha es mínima, ya que, además de sus múltiples complicaciones, este es un reloj claramente esqueleto. Al contrario que muchos relojes con esta condición, la legibilidad del tiempo en el Concept Supersonería es clara y precisa. Para ello, y sin perjudicar su esqueletizado, Relojes Audemars Piguet Mercadolibre Réplica recurre a un índice inclinado en el perímetro de la esfera.

Pero no olvidemos que estamos ante un reloj con la complicación de cronógrafo, con lo que se requiere como mínimo un contador que totalice el tiempo cronometrado. Este contador se ubica a las 3 horas, sobre una placa que podemos considerar como la única zona no esqueletizada del reloj. La configuración es un tanto peculiar y ciertamente original ya que consiste en una aguja doble que nos indica el tiempo cronometrado sobre un máximo de 30 minutos. Si el extremo de la aguja que indica un índice es de color blanco estamos en los primeros 15 minutos de medición. Si es el extremo amarillo debemos leer la escala de los minutos comprendidos entre el 15 y el 30.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - dial

Al igual que la práctica totalidad de los relojes con complicación de tourbillon, este elemento, ubicado a la altura de las 6 horas, es plenamente visible en el Royal Oak Concept Supersonería. En consonancia con el resto de elementos que componen la esfera, el puente que lo sustenta es de color negro y su acabado es satinado, lo que crea un fuerte y atractivo contraste con el tono dorado del volante.

Mi conclusión sobre el diseño de la esfera del Royal Oak Concept Supersonería es totalmente positiva. Su estética es plenamente vanguardista y acorde con la estética general del reloj. Además, tiene el gran mérito de ofrecer una clara legibilidad de sus indicaciones, algo poco común en relojes de estética no clásica, y menos aun si se trata de una configuración esqueleto, como es el caso de este Concept.

 

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería – el movimiento

Como todo movimiento del más alto nivel, el calibre 2937 de Audemars Piguet cuenta con una configuración plenamente integrada. Es decir, no se trata de una base de movimiento sobre la que se añaden módulos de complicaciones. Ello significa que se ha partido de cero en su desarrollo y que además difícilmente se podrá modificar para restarle o añadirle otras complicaciones. Lógicamente esto perjudica su relación coste/amortización y explica en su mayor parte el elevado precio de este reloj.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - calibre-2937 front

El calibre 2937 es de carga manual y su frecuencia de oscilación es de 21.600 alternancias por hora. La reserva de marcha es de 42 horas, una cifra que nos puede parecer muy conservadora, pero que en realidad es bastante notable si tenemos en cuenta la gran cantidad de energía que requieren las complicaciones que nos ofrece.  Con un total de 478 componentes, su diámetro es de 29,90 mm y el grosor de 8,28 mm.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - calibre 2937 back

Siguiendo la estética general del reloj, los puentes del calibre 2937 son negros con acabado satinado. En esta imagen de su reverso podemos apreciar la decoración perlada de la platina, un acabado típico de este elemento, pero que en este caso se realiza con unos círculos de tamaño mucho mayor del habitual. En la parte superior de la imagen vemos la rueda de pilares que gobierna las funciones del cronógrafo.

Como resumen, se puede concluir que, además de su avanzada tecnología, el calibre 2937 que equipa este Royal Oak Concept Supersonería aporta una estética sumamente atractiva y, como es de esperar en un movimiento Audemars Piguet de élite, sus acabados son irreprochables.

 

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería – la sonería

El concepto de sonería en un reloj se basa un sistema compuesto de dos martillos que percuten y por tanto hacen vibrar unos timbres circulares de sección tubular, lo que genera el sonido. Hasta aquí todo es lógico y hasta simple, pero en Alta Relojería no basta con hacer las cosas, hay que optimizarlas al máximo buscando la perfección. Con esta premisa, las grandes manufacturas relojeras han exprimido sus capacidades durante siglos para conseguir dos objetivos.

El primero es optimizar la calidad del sonido emitido, con una tonalidad y una extensión de las notas que resulte placentera al oido, o dicho de otro modo; que el reloj se convierta en un verdadero instrumento musical. El segundo objetivo es conseguir que, sin perder las anteriores cualidades, el sonido sea lo más potente posible.

El primero de los objetivos se ha optimizado hasta el punto que podemos afirmar que cualquier repetición de minutos de una marca de alto nivel emite un sonido altamente musical. El segundo de los objetivos, el de un sonido acústicamente potente, seguía siendo un problema sin resolver. Nunca he oido un reloj con sonería que se oiga a más de 2 metros, y ello con un entorno silencioso ya que en un ambiente callejero es totalmente inaudible. Este es el punto donde Audemars Piguet con este Royal Oak Concept Supersonería ha logrado una auténtica revolución. Pero vamos por partes.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - timbres

En al imagen superior podemos ver los timbres de la sonería, de cuya longitud, composición y flexibilidad depende en su mayor parte la calidad del sonido que emitan al percutir los martillos sobre ellos. En este elemento Audemars Piguet ha centrado uno de los avances técnicos del Royal Oak Concept Supersonería, que consiste en optimizar el proceso productivo con el fin de que todos los timbres que se fabrican sean lo más iguales posible.

La gran ventaja de ello, es que en cierto modo se estandarizan las cualidades sonoras de los timbres, con lo que, partiendo de una base conocida, el trabajo del afinador para adaptar su sonido a la geometría y a los distintos materiales de las cajas donde se monte se simplifica enormemente. Este es sin duda un avance significativo, aunque no revolucionario. Pero la auténtica revolución también tiene una relación muy directa con este componente.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - martillos

Tomamos una imagen del apartado referente al movimiento y la ampliamos para observar con detalle los martillos de la sonería. Inmediatamente apreciaremos que falta algo; los timbres sobre los que deben percutir dichos martillos. Y no, no se trata de un descuido de Audemars al editar la imagen, es que por primera vez este elemento no forma parte del movimiento.

En la siguiente imagen, que nos muestra el despiece de la caja, podemos ver que aparece un elemento inédito entre el fondo y la carrura. Se trata de una placa realizada con una aleación de cobre que actúa a modo de caja de resonancia y sobre la cual se fija directamente el timbre, evitando todo contacto de este elemento con el movimiento.

Como ocurre en numerosas ocasiones, la idea parte de la casualidad. El responsable técnico de Audemars Piguet nos contó como todo se inició en una conversación casual con un experto en instrumentos musicales. Al mencionar el problema de la poca intensidad que emiten los relojes con sonería, este detectó con toda naturalidad donde reside el problema, que consiste en que la unión física del timbre con el movimiento amortigua el sonido. Asistí a una demostración de este fenómeno físico-acústico donde con una pequeña bara de acero se golpeaba una pieza también de acero, lo que provoca un sonido de determinada intensidad. Acto seguido se repite el experimento depositando la placa de acero sobre una base, también metálica, y sorpresa!… el sonido se amortigua de una forma impensable.

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - despiece

Traducido a la construcción de un reloj, resulta que el esquema tradicional de unir fisicamente el timbre con la platina del movimiento provoca que la intensidad del sonido que emite dicho timbre al ser percutido por los martillos se ve amortiguado por el conjunto del movimiento. Si simple es el problema, simple es también la solución y de una lógica aplastante.

Se introduce un nuevo elemento entre el fondo y la carrura de la caja. Esta nueva pieza, a modo de caja de resonancia, está realizada con una estructura y aleación de materiales que optimizan la amplificación del sonido. Sobre esta placa resonante se fijan directamente los timbres y le transmiten sus vibraciones cuando son percutidos por los martillos. De hecho se trata de un esquema parecido al de cualquier instrumento de cuerda , como puede ser una guitarra o un violín.

Pero ahí no caba todo. Si observamos de nuevo la imagen, veremos unas aberturas en el lateral del fondo de la caja. Su misión es obvia y no es otra que dejar salir el sonido que produce la sonería del reloj. Al actuar la caja de resonancia como doble fondo, la hermeticidad del reloj no ve afectada por dichas aberturas. Con ello se soluciona de un plumazo otro de los grandes problemas de los relojes con sonería de concepto clásico, que es su nula hermeticidad. En la mayoría de ellos incluso se prescinde de las juntas herméticas que se insertan entre fondo, carrura y bisel con el fin de permitir una mínima emisión del sonido. Como vemos en la imagen, entre los timbres y la carrura, Audemars Piguet no tiene ningún problema para insertar un anillo hermético ya que el sonido se expandirá a través de la aberturas del fondo de la caja. Por ello, el Royal Oak Concept Supersonería garantiza una hermeticidad de 20 metros, algo impensable en un reloj con esta complicación.

El resultado de este esquema revolucionario es espectacular. En una sala de audiencias en forma de teatro, con más de 100 asistentes, Audemars Piguet realizó una demostración del Royal Oak Concept Supersonería. Primero hizo sonar un reloj convencional con repetición de minutos y el resultado fue que ni las personas sentadas en la primera de las filas, a unos 3 metros del reloj, percibieron sonido alguno. Acto seguido se repitió con el Supersonería e incluso los asistentes sentados en la última fila, a más de 20 metros del reloj, oyeron con claridad los distintos sonidos que nos indican horas, cuartos y minutos.

 

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería – conclusiones

Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería - frontEl Audemars Piguet Royal Oak Concept Supersonería, con una imagen decididamente vanguardista, me parece un reloj sumamente atractivo desde el punto de vista estético, aunque este es un juicio evidentemente subjetivo y por tanto sujeto a los gustos particulares de cada persona.

Lo que si es plenamente objetivo e indiscutible es la enorme revolución que aporta en el apartado de la optimización de las cualidades musicales de su repetición de minutos, con especial hincapié en su innovador sistema de potenciación del sonido. Como he afirmado al inicio de este artículo, sin duda habrá un antes y un después del Royal Oak Concept Supersonería en relojes con este tipo de complicación, una sentencia que, en relojería, se ha podido realizar muy pocas veces en las últimas décadas.

Su precio, que ronda los 500.000 euros, puede calificarse de estratosférico y solo al alcance de unos pocos privilegiados, pero, aunque pueda parecer una afirmación casi ofensiva, está plenamente justificado si lo comparamos con el de otros relojes con sonería de grandes marcas.

Hay muchas realizaciones de Audemars Piguet que no me atraen, pero ante este Royal Oak Concept Supersonería, al igual que al finalizar un buen concierto de un solista de élite, no me queda más que aplaudir con entusiasmo.